Los mexicanos estaban decididos a clasificarse para el Mundial de Qatar, y lo demostraron ante su rival panameño. Al ser este partido tan importante de un octogonal entre los mejores equipos de la CONCACAF, ¡no había espacio en ninguno de los dos equipos para errores o recaídas en los errores contenidos que podrían costarles todo!

El partido terminó empatado, pero no fue hasta los 80 minutos de juego cuando Raúl Jiménez abrió el marcador para que el equipo mexicano se llevara los tres puntos. Esto les aseguró el tercer puesto, detrás de Estados Unidos, en los partidos de clasificación contra determinados rivales, y también se mantienen vivos de cara al Mundial del 2026 que viene, ¡con alguna esperanza todavía!