El uso de dispositivos móviles representa un «arma de doble filo» para los estudiantes universitarios de los planteles públicos y privados en el Estado.
El utilizar el celular al interior de las aulas divide opiniones de directores y maestros en diferentes universidades, algunos lo consideran como elemento de distracción y otros como una herramienta de aprendizaje necesaria.
Directivos y docentes coinciden en que la población universitaria carece de una cultura para utilizar los dispositivos móviles y que es un terreno fértil para ser encauzado hacia una mejor educación.
Rita del Carmen, directora del Laboratorio de Innovación Educativa de la U-ERRE, indicó que es necesario integrar la tecnología con un objetivo específico y analizarla con una perspectiva de lo que se quiere lograr en clases.
«Cuando el celular no está dentro de un diseño de clase y no están identificadas cuáles son las evidencias de aprendizaje definitivamente es un distractor.
«Sin embargo, cuando se integra la tecnología para recolectar evidencias de aprendizaje tanto para el maestro como para el alumno, pasa de ser un distractor a una herramienta que enriquece el proceso educativo», mencionó.
En la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL) el reglamento dice que es el maestro quien establece las normativas al inicio de semestre.
«Como en todos los planteles el profesor tiene que pedir orden en cuanto al desarrollo de su clase, ya que es visto como una falta de respeto que no se atienda algo por estar en el dispositivo», señaló Héctor Alvarado, vocero de la UANL.
En el Tec de Monterrey es decisión de cada profesor. Por un tiempo se buscó restringir el uso, pero la medida fue cuestionada por familias que fueron víctimas de secuestro virtual.
La prohibición fue descontinuada aunque la previsión en el reglamento se mantiene.
En el caso del Centro de Estudios Universitarios (CEU) el reglamento interno prohíbe el uso del celular al interior de las aulas.
Actualmente está en revisión, ya que es prácticamente imposible tener un con-
trol sobre su uso, señalaron autoridades escolares.
«Me estoy cuestionando mucho hasta dónde limitar el uso del celular porque depende de la materia y del alumno. Hay veces que el alumno aparentemente está distraído, pero la realidad es que está investigando sobre la clase», indicó Mireya Martínez Vargas, directora académica del CEU.
Jorge Hernández, director de la Universidad de Comunicación Avanzada (UNICA), indicó que dentro del plantel no hay un reglamento que prohíba el celular durante clases y es el maestro quien lo decide.
La Universidad del Norte también tiene regulado el uso de dispositivos móviles y se permite su utilización sólo confines académicos, previa autorización del maestro, aunque el plan a corto plazo es aprovechar las tecnologías como herramienta de trabajo y no como un distractor.
