Europa se enfrenta a su peor crisis humanitaria desde la Segunda Guerra Mundial como consecuencia de la campaña de invasión y ocupación de Rusia contra Ucrania. La Unión Europea ha respondido con una dureza sin precedentes que permite mecanismos de protección temporal nunca vistos para ayudar a los que huyen de países devastados por la guerra como Ucrania, que una vez más ha sido objetivo de Moscú a pesar de las peticiones internacionales para que no lo hiciera.