El Congreso mexicano ha aprobado una iniciativa para establecer la Ley de Destitución en la Ciudad de México. Esta nueva ley permitirá que cualquier funcionario que cometa violaciones graves a las leyes y reglamentos constitucionales federales, como la corrupción o el mal manejo de fondos públicos, entre otras cosas, pueda ser sometido a juicio político por sus pares en el lugar más sagrado que representa la democracia: la Cámara de Senadores.