El cuerpo de Beatriz Calleja, quien fue secuestrada el pasado 23 de junio, fue encontrado sin vida junto a un hombre en el interior de una camioneta abandonada cerca de la exfábrica Covadonga.
La joven de 23 años había sido levantada por un comando armado que disparó contra los presentes en el bar Pinochos en Puebla, dejando cinco personas muertas y varias heridas.
La Fiscalía confirmó que el cadáver encontrado corresponde a Beatriz Calleja, quien había sido reportada como desaparecida por sus familiares. Tras su secuestro, se difundió en TikTok un video en el que la joven aparece respondiendo preguntas y confesando su involucramiento en la venta de drogas en el bar Pinochos, así como en la obtención de información personal de los clientes.
Los familiares de Beatriz identificaron su cuerpo entre los dos encontrados en la camioneta abandonada. La noticia ha generado conmoción y rechazo en la sociedad, y las autoridades continúan investigando este crimen atroz y violento.
Este trágico suceso pone de manifiesto la vulnerabilidad de las mujeres y la grave situación de violencia que se vive en algunos lugares de México. Exige la necesidad de fortalecer las medidas de seguridad y justicia para prevenir y combatir estos actos criminales que afectan a la sociedad en su conjunto.