A solicitud del Cisen, los servicios de inteligencia española monitorearon la visita de una de las hijas de Joaquín «El Chapo» Guzmán a Madrid en julio de 2015.

La hija de Joaquín «El Chapo» Guzmán realizó un viaje por varias naciones europeas, entre ellas España, Italia y Reino Unido, en julio de 2015, apenas unos días después de la fuga de su padre del Centro Federal de Readaptación Social del Altiplano. A petición del gobierno mexicano, los servicios de inteligencia española llevaron a cabo un monitoreo de las actividades de la hija del narcotraficante durante su estancia en Madrid.

El Centro de Inteligencia y Seguridad Nacional (Cisen), dirigido en ese entonces por Eugenio Imaz Gispert, solicitó apoyo a la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO) de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional de España. El objetivo era recopilar información detallada sobre las actividades de la hija de «El Chapo» Guzmán en el país. Aunque no se ha establecido ningún vínculo entre esta vigilancia y la fuga del narcotraficante, es evidente que se prestó especial atención a la hija del capo durante su viaje europeo.

Las comunicaciones vía WhatsApp entre el entonces jefe de la unidad de la Policía Nacional, Enrique García Castaño, y el secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, revelan esta colaboración entre las autoridades mexicanas y españolas en relación con la vigilancia de la hija de «El Chapo». Estos mensajes forman parte de la «Operación Kitchen», que investiga acciones ilegales relacionadas con el gobierno español.

La investigación en curso, conocida como «Operación Kitchen», se centra en acciones ilícitas llevadas a cabo por figuras clave del gobierno español. Aunque el monitoreo de la hija de «El Chapo» no está directamente relacionado con el caso, estos mensajes de WhatsApp revelan una serie de temas diversos, incluyendo el viaje de la hija del narcotraficante, reuniones con ejecutivos de Cemex y otras cuestiones de interés entre México y España.