La investigación de la BBC revela que las fuerzas rusas han matado a muchas personas en Ucrania.
El canal de noticias investigó un incidente en un campamento de verano en el que se cree que hasta 30 soldados entraron y empezaron a disparar, matando tanto a civiles como a militares, antes de prender fuego a los edificios en los que encontraron escondidas a las víctimas que habían conseguido escapar de debajo de los muebles o detrás de estanterías repletas de alimentos, como latas de conserva, que esperaban pacientemente hasta que alguien se acercara alegando que necesitaban algo ahí fuera ahora mismo.

Tras la reciente agresión de Rusia, se han descubierto más de mil cadáveres en toda la región ucraniana de Bucha. Muchos de ellos fueron enterrados a poca profundidad, sin dignidad ni ceremonia, como si no fueran más que animales muertos esperando a su verdugo en algún tipo de tiempo de guerra, lo que resulta absolutamente desgarrador, sobre todo porque estas personas no estaban involucradas en ninguna acción de combate contra las fuerzas gubernamentales, probablemente porque no parece que quede nadie vivo que pueda hacer nada de todos modos.