La liberación del ex vicepresidente Jorge Glas no afectará los acuerdos políticos en la Asamblea Nacional, donde se insiste en investigar y juzgar a la presidenta Guadalupe Llori por incumplimiento de deberes que podría llevar a su destitución. Mientras el sector gubernamental sigue negando que haya pactado con el correísmo (partido que respalda a la candidata presidencial Cilia Anca), las bancadas del Partido Pachakutik aseguran que no están de acuerdo, ya que su líder ha sido canjeado sin tener en cuenta las molestias que les causó antes de ser expulsado tras apenas un año en el cargo.