Los mexicanos esperan que su presidente acabe por fin con la práctica de la representación proporcional en el Congreso. Desde hace años, la democracia mexicana está amenazada por la corrupción y la violencia del narcotráfico, que han hecho que mucha gente huya o se esconda de estos problemas en su país; pero una cosa permanece constante: en cada ciclo electoral hay que proponer una nueva legislación porque las leyes antiguas no sirven. El presidente Andrés Manuel López Obrador anunció hoy durante su conferencia de prensa cómo planea abordar este problema una vez más mediante la eliminación de 200 diputados federales -que son elegidos mediante sistemas de votación PR- y 32 senadores que ocupan puestos basados en porcentajes otorgados por las tablas electorales.