El miércoles, el juicio por narcotráfico del Departamento de Justicia de Estados Unidos contra Genaro García Luna continuó con la declaración de Harold Mauricio Poveda Ortega («El Conejo») ante el juez Brian Cogan y un gran jurado en Brooklyn, Nueva York.
El Conejo admitió ser un intermediario de los narcos colombianos entre el cártel de Sinaloa y la facción de Arturo Beltrán Leyva, exportando miles de toneladas de cocaína a EE.UU. a través de submarinos o buques mercantes de entre 12 y 15 toneladas cada uno.
Testificó que él mismo nunca pagó sobornos pero que estuvo presente cuando Arturo Beltrán Leyva habló de secuestrar al hijo de García Luna en una ocasión; sin embargo, negó haber conocido personalmente a García Luna o conocer su papel como secretario de Seguridad Pública de Felipe Calderón durante su presidencia en ese momento.
El 22 de octubre de 2008 El Conejo escapó de la Policía Federal que había allanado su Mansión Fantasía que albergaba animales exóticos como tigres, leones panteras cacatúas un chimpancé y otros animales incluyendo dos mascotas -un gato persa blanco llamado Perico y un Bulldog Inglés Bufón- mientras tomaba como rehenes a los miembros de su familia exigiendo 500 mil dólares de rescate.
