En un macabro escenario, la mañana de hoy se topó con la cruda realidad de nueve hombres sin vida cerca de un maldito ducto de Pemex en San Juan del Río, Querétaro. Los detalles sangrientos emergieron cuando los militares, en colaboración con la gente de Pemex, se toparon con esta pesadilla mientras inspeccionaban la línea de ductos.

Además de los cuerpos, había dos vehículos que seguramente jugaron un papel en esta tragedia. El secretario de Seguridad Pública Municipal, Ángel Rangel Nieves, confirmó el infierno en un video, destacando que la policía municipal ha acordonado el área para colaborar en las investigaciones. Un recordatorio brutal de la violencia que persiste y exige respuestas.
Este sombrío episodio plantea innumerables preguntas sobre el horror que ocurrió y subraya la necesidad imperante de una investigación sin concesiones para arrojar luz sobre los hechos y castigar a los responsables.