En un sentido estricto, no todo lo que escribieron Edgar Allan Poe, Stephen King, H.P. Lovecraft, Richard Matheson o Richard Laymon (autor de la frase que abre el telón de este artículo, extraída de su siniestra novela Noche infinita), quienes son algunos de los más grandes exponentes de la literatura de horror, vale la pena leerse. Como artistas y como seres humanos también cometieron o han cometido pecados que no manchan su trayectoria, pero que sí nos han dado a pensar que la perfección es cosa de otro mundo. A fuerza de tanto escribir, en algún momento los defectos o la falta de virtudes tendrían que relucir en hombres que le dieron al género grandes joyas.

En el cine de horror pasa lo mismo. ¿Cuántas cintas, en promedio, se filmarán al año en todo el mundo? Seguramente se cuentan por cientos y menos de la mitad realmente aportan algo digno al género, cuyas fórmulas tienden a ser repetitivas y flojas. Netflix ha recogido un buen puñado de ellas provocando que no todo lo que se encuentra en su catálogo sea digno de verse.

Nos dimos a la tarea de hacer una depuración del catálogo de horror de la plataforma destreaming para elegir los siete títulos que realmente son considerados grandes productos del género; aquellos que al verlos te darán una buena historia, dirección, estupendas actuaciones y lo mejor de todo: la sensación de que el horror es uno de los grandes entretenimientos inventados por el hombre. Posiblemente nacido alrededor de una fogata, dedicando horas a la invención de espeluznantes crónicas que reflejaran el temor humano a lo desconocido.

Pet Sematary (1989)

Stephen King la ha calificado como una de las mejores adaptaciones que se han hecho de sus más de 30 novelas, desde su debut literario en 1974 con Carrie. Mary Lambert demostró una gran capacidad para recoger este dramático, a la vez que terrorífico, relato del autor nacido en Maine y transmitir su principal tema: el temor a la pérdida de nuestros seres queridos y lo que estamos dispuestos a hacer con tal de tenerlos de vuelta.

Basándose en antiguos ritos y leyendas sobrenaturales de los indios de las praderas norteamericanas, King construyó un relato acerca de la resurrección y las fatales consecuencias de jugar con fuerzas desconocidas. Esos horrores se despliegan a la perfección en esta cinta que cerró con broche de oro la década de los 80, en la cual surgieron grandes producciones que hoy se cuentan entre las mejores del género. Pet Sematary sin duda está entre ellas.

Bram Stoker’s Dracula (1992)

Fue una de las mejores cintas de horror filmadas en la década de los 90, y se trata de la mejor adaptación que se ha hecho hasta el momento de la célebre novela, Drácula. Cuenta con un reparto excepcional conformado por una jovencísima Winona Ryder (sí, aquella que aparece en Stranger Things como la histérica madre de Will), Keanu Reeves, Gary Oldman como el mejor conde Drácula de la historia, y Anthony Hopkins como el doctor Van Helsing.

Todo en esta producción roza la perfección: la música llevada a cabo por el compositor polaco Wojciech Kilar, la fotografía oscura y tenebrosa, las actuaciones, el vampiro en sus diferentes etapas y manifestaciones que jamás habían sido caracterizadas de manera tan fiel al relato original.

Vela este noche, tápate muy bien con tus sábanas y deja de creer en las cintas de horror que inundan las salas comerciales y que aportan poco a la historia del género.

The Others (2001)

Está entre las cinco mejores cintas de fantasmas en toda la historia del género. Amenábar, uno de los directores españoles más meticulosos de todos los tiempos, creó una hermosa, poética y terrorífica historia sobre la soledad, la paranoia y los perturbadores miedos infantiles a lo desconocido. Los otros fue un regreso de las historias fantasmagóricas al nuevo milenio, para demostrar que lo sobrenatural aún tenía nuevas oportunidades de deslumbrar.

Para destacar la soberbia actuación de la actriz australiana Nicole Kidman, quien se mete en la piel de una madre sobreprotectora que lucha en contra de las presencias que la acechan a ella y sus hijos. Descubre lo más pronto que puedas el relato que aterró a miles de espectadores y los hizo temer de nuevo a la oscuridad.

Babadook (2014)

Para muchos críticos y fanáticos se trata de la última gran cinta del género, una oscura joya que reúne todos los elementos de un relato sobrenatural en perfecta forma. La locura de una madre y su hijo impregna un relato que recoge la tradición de los cuentos de fantasmas, la presencia de seres imaginarios o reales, el miedo a la soledad y el desprecio a la oscuridad en plena época moderna.

Babadook es una aterradora muestra de cómo los cuentos infantiles o de hadas no son precisamente lo más indicado para la imaginación de un niño, como lo hemos visto en los relatos de escritores como los hermanos Grimm o Hans Christian Andersen, quienes más que escribir obras infantiles hacían oscuras alegorías a los horrores y perversiones de lo desconocido. Si quieres ser testigo de una película diferente y original, tienes que ver por primera vez Babadook.

Raw (2016)

No es sangre por sangre, ni es sólo una película gore. Se trata de un relato sobre la condena de llevar encima una maldición y enfrentarlo con cierta resignación. Julia Docournau ha regalado al mundo una de las historias más perturbadoras de los últimos años, llena de violentas escenas que incomodan y aterran al mismo tiempo. Tal vez tengas deseos de cortar la cinta a la mitad o en ciertas escenas clave, pero el relato es tan absorbente que al mismo tiempo querrás llegar al final y ser testigo de una de las concusiones más dramáticas del cine de terror moderno.

Durante su estreno en el Festival de Cine de Toronto de 2016, los paramédicos tuvieron que asistir a dos personas que sufrieron desmayos ante la impresión que se llevaron por las escenas de canibalismo de Raw. Si eres un asiduo espectador de cine de horror extremo, es muy probable que soportes ver esta extraordinaria cinta. En cambio te llevarás una grata impresión a causa del relato, una genialidad pocas veces vista.

I Am the Pretty Thing that Lives in the House (2016)

Cuando crees que el cine de terror ya no tiene más que ofrecer que no sean pálidas y digitalizadas criaturas que caminan como si fueran contorsionistas, llegan directores como Osgood Perkins y te callan la boca con relatos sencillos pero efectivos como esta aterradora cinta de fantasmas. Nos cuenta la historia de una enfermera llamada Lily (Ruth Wilson) de carácter asustadizo que llega a trabajar a la casa de una escritora de novelas de horror cuya salud está muy debilitada.

Cada habitación, pasillo y rincón representan una amenaza para Lily, quien comienza a ser acosada por extraños ruidos y visiones que la perturbarán en estado máximo. I Am the Pretty Thing that Lives in the House no sólo es perfecta y poética desde su título, sino que hasta la última escena te inundará de horror puro y agonizante. Una valiosa historia que demuestra que todo lugar está lleno de fantasmas a los que habrá que pedir permiso para habitar los espacios que les pertenecen.

A menudo cuesta un arduo trabajo encontrar una buena cinta de horror que nos lleve a pensar que el género se ha renovado o que aún goza de creatividad. Sin embargo, buscando más allá de Netflix encontrarás numerosas películas de este género con grandes virtudes que harán que tus deseos de consumir excelentes historias quede saciada. No pierdas la fe, busca, consume e investiga lo que está pasando en el horror moderno. Aún hay cosas que valen la pena en los sitios menos esperados.